miércoles, 29 de mayo de 2013

Máscaras de teatro chino

Uno de los regalos más pintorescos con los que me volví de China las navidades pasadas fue este precioso juego de portapinceles decorado con máscaras del teatro chino tradicional.



Como podéis ver el diseño está muy cuidado, tanto en los propios portapinceles como en la caja que los contiene. Ahora mismo están bien guardados en el armario, aunque en un futuro no dudo en dedicarles una balda en alguna estantería a modo de decoración. Sea como sea, las máscaras del teatro chino tradicional tienen un nosequé de sugestión folklórica que me encanta.

domingo, 26 de mayo de 2013

Ping An - Wo ai ni zhong guo (The Voice of China)


Una de las cosas que más me sorprenden de la sociedad china es su alta formación musical. Aquí quien más quien menos canturrea en la ducha o se arranca a cantar por cualquier motivo pero formación musical, lo que se dice formación musical... la justa.  En China, en cambio, la música la estudian desde pequeños y tocar un instrumento en la infancia es una práctica casi general (no, la flauta dulce que tocábamos de enanos no cuenta como instrumento). En mi ámbito chino cercano, por ejemplo, todos los peques tocan perfectamente el piano como mínimo - y la arpa china y la guitarra ... - además de haber recibido clases de voz. 

Supongo que en parte es por su sistema educativo y la cultura del esfuerzo que lo fundamenta, en parte por la musicalidad del chino, que predispone a tener oído para estas cosas... no lo sé. Pero lo cierto es que, desde mi punto de vista de negado musical, es algo que me produce una envidia considerable.

sábado, 25 de mayo de 2013

Presentación


Acercarse a la cultura china desde el mundo occidental es una sensación parecida a la asomarse a un  escarpado precipicio o a la inmensidad de una puesta de sol en una pradera infinita. Sorprende - al menos a mí me pasa - la profundidad de su cultura milenaria, pero también la diversidad geográfica, las distintas tradiciones étnicas, el exotismo de su idioma y sus costumbres. Impresiona también la feroz dualidad de la China moderna, en una espiral dialéctica entre lo viejo y lo nuevo, entre el mantenimiento de una identidad plurisecular y la apertura a los nuevos modos de vida que vienen de Occidente.

La sensación de pasmo al acercarse al detalle de la vida cotidiana china desde Europa no debe ser muy diferente a la que tuvieron los europeos del siglo XIII cuando descubrieron el Asia profunda gracias a la conexión mongola. Que las vivencias de Marco Polo fueran durante generaciones uno de los grandes best sellers en la convulsa y siempre ávida de referentes Europa de los siglos XIV y XV es un buen ejemplo de nuestra fascinación por ese "otro mundo" que nos impacta por su singularidad. Pasó con el descubrimiento de América, con el revival medieval del siglo XIX o con la irrupción del género fantástico y la ciencia ficción en el siglo XX.

En Mi pequeña China intentaré hablar un poco de todo esto y de algunas cosas más. De mi acercamiento a China, sus tradiciones, su lengua, su gastronomía y su día a día.

Espero que me acompañéis en este pequeño viaje.